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Del scroll a la compra en segundos: el social commerce está revolucionando el consumo digital y abriendo nuevas oportunidades para las marcas de consumo masivo.
VOLVER AL INICIOImagina por un momento esto: estás desplazándote por tu app favorita de redes sociales, ves un video de un influencer probando un nuevo producto para el cuidado de la piel. Hace una demostración rápida del antes y el después con un resultado espectacular. El producto está etiquetado en el video así que haces clic en el enlace, compras en el acto y al día siguiente lo tienes en casa. No visitas una tienda. No pasas por un market place tradicional. Compras donde te entretienes, conversas y compartes.
Eso es social commerce. Y lo que hace cinco años parecía un experimento minoritario, hoy es una tendencia de alto impacto que está cambiando la forma en que se consume —y por lo tanto cómo deben competir las marcas de consumo masivo.
a) Redes sociales + compra inmediata
Las redes ya no son solo para ver contenido: se han convertido en vitrinas, pasarelas y cajas al mismo tiempo. En plataformas como Instagram, TikTok o WhatsApp, los botones de “comprar” se activan directamente. Esto crea un flujo único: ver → decidir → comprar sin salir de la app.
b) Crecimiento regional acelerado
En América Latina, el mercado de social commerce crece con fuerza: se espera que alcance los US$ 14.6 mil millones en 2025, con una tasa anual de crecimiento de ~20 %. (GlobeNewswire)
Este número revela que aún estamos en una fase de adopción, lo que abre una ventana de oportunidad clara para las marcas que se muevan antes.
c) Comportamiento del consumidor digital y móvil
Los consumidores latinos pasan cada vez más tiempo en redes, y no solo como espectadores: están interactuando, comparando, comentando y comprando. Las marcas pueden capturar un momento que antes perdían: la decisión “on the fly”.
Por ejemplo, un reporte regional menciona que “las plataformas sociales se están convirtiendo en el punto principal de descubrimiento de productos”. (latamintersectpr.com)
Para los ejecutivos que dirigen productos de consumo masivo, este cambio no es un lujo: es una necesidad estratégica. Veamos cómo se traduce en acción.
Visibilidad + contexto social
En un marketplace tradicional, tu producto compite porbúsquedas o banners. En social commerce, debe llamar la atención mientras el usuario hace scroll, interactúa o se divierte. Esto exige creatividades distintas, contenido más vivo, conexión emocional, comentarios, “lives”.
Para una marca, significa que el formato importa tanto como el precio.
Surtido y formatos adaptados
Los usuarios compran en social commerce cuando algo les “salta” en feed o en video. Si el producto que ven no existe en ese canal, la oportunidad se pierde. Por tanto, la cobertura digital del catálogo también se vuelve crítica en este ámbito.
Un medicamento, suplemento o producto de salud debe aparecer en formatos aptos para social: packs pequeños, ofertas instantáneas, “bundle” de experiencia, etc.
Colaboración con influencers y comunidades
En social commerce, la confianza se construye rápido. Un influencer con credibilidad puede generar compras directas. Las marcas que colaboran bien pueden convertir seguidores en compradores.
Para un ejecutivo CPG: ¿tu presupuesto de marketing digital incluye social commerce real y no solo awareness de marca?
Medición de nuevos KPIs
Los KPIs clásicos siguen válidos (ventas, margen, participación), pero en social commerce conviene incorporar:
Estos datos abren la puerta a optimizar la estrategia en tiempo real
Aquí algunas señales concretas que las marcas deberíanvigilar:
El desafío para los líderes de marcas de consumo masivo no es solo “tener presencia en redes”. Es entender que el social commerce redefine roles y relaciones:
Si antes el eCommerce era visto como un canal adicional, hoy el social commerce es un canal emergente con momentum y alcance.
En América Latina su crecimiento proyectado (US$ 14.6 mil millones en 2025) muestra que aún hay espacio para ganar. (martechedge.com)
Para cualquier marca CPG, ignorar esta vía sería perder una parte creciente del consumo donde el usuario está conectado, entretenido y listo para comprar.
La pregunta que queda es:
¿Tu marca está solo “publicando en redes” o está realmente vendiendo desde redes?